El servicio de certificación de documentos es un proceso mediante el cual se verifica la autenticidad y validez de un documento oficial. Esta certificación es realizada por una entidad autorizada, como un notario público, un funcionario gubernamental o una institución designada, dependiendo de los requisitos legales del país o jurisdicción en cuestión.
La certificación de documentos es comúnmente requerida para garantizar que los documentos presentados en determinados trámites o procedimientos legales sean auténticos y confiables. Algunos ejemplos de documentos que pueden requerir certificación son:
El proceso de certificación puede variar según el país o la entidad que lo realice, pero generalmente involucra lo siguiente:
Verificación del documento original: El documento es presentado en su forma original para ser examinado y comparado con el contenido que debe contener según la normativa vigente.
Autenticación de la firma: En muchos casos, se verifica la firma del emisor del documento para asegurarse de que sea genuina. Si es necesario, se solicita que el firmante esté presente para verificar su identidad.
Sello o etiqueta de certificación: Una vez que se ha comprobado la autenticidad del documento, se coloca un sello o etiqueta de certificación en el mismo, junto con la firma del certificador, para indicar que ha sido debidamente verificado y certificado.
Registro (opcional): Algunas certificaciones pueden ser registradas en una base de datos o archivo público para facilitar futuras referencias o consultas.
Es importante destacar que la certificación de documentos es diferente de la legalización o apostilla. Mientras que la certificación asegura la autenticidad del contenido del documento, la legalización y la apostilla son procesos que confirman la validez de un documento en el extranjero o en un país que no sea el de emisión, siguiendo los procedimientos y tratados internacionales aplicables.